Con los hechos violentos y otros ilícitos que siguen ocurriendo en el estado de Quintana Roo, en lo particular la ciudad de Cancún y Playa del Carmen, quedó demostrado que el Complejo de Seguridad fue creado como Centro de Espionaje y no para la seguridad de los quintanarroenses, pues los acuerdos que tiene el gobierno con grupos delictivos pasan sobre la tecnología de última generación a nivel internacional.
El pasado 24 de julio de 2021, el gobernador de Quintana Roo Carlos Joaquín González, inauguró el Centro de Comando, Control, Cómputo y Comunicación (C-5) en esta ciudad de Cancún, donde estuvieron presentes representantes de los tres niveles de gobierno; inclusive, Jesús Alberto Capella Ibarra, quien a pesar de que estaba suspendido y todavía bajo investigación, llegó uniformado y representando a la “Policía Quintana Roo”.
En el discurso, el ejecutivo dijo que este Complejo de Seguridad era de “los más avanzados en la tecnología de América Latina y su creación tiene una inversión de dos mil 600 millones de pesos”; esto de acuerdo a Yohanet Torres Muñoz, secretaría de Finanzas y Planeación en el Estado.
A la fecha, lo que se sabe que en Quintana Roo existen alrededor de dos mil 200 cámaras de video vigilancia; solamente Cancún tiene instaladas más de mil 300 monitoreadas por el C-5, el resto está distribuida en Playa del Carmen, Cozumel, Isla Mujeres, Tulum y Chetumal, además de los arcos de seguridad que atraviesan las avenidas, y una de más avanzada instalada en la entrada de la capital del Estado.
Toda esta tecnología desde hace casi cinco años que inició el gobierno de Carlos Joaquín, se encuentra obsoleto ya que pasa sobre ella incluyendo la reciente creación del Complejo de Seguridad, los acuerdos con grupos delictivos, pues el C-5 más bien funciona como Centro de Espionaje y no de seguridad para el Estado.
FISCAL LE PARA CUELLO AL EJECUTIVO
Luego de la reciente inauguración, la Policía Ministerial detuvo en la delegación Alfredo V. Bonfil perteneciente al municipio de Benito Juárez, a uno de los cabecillas del crimen organizado alias el “18”, por lo que salió enseguida el fiscal General del Estado, Oscar Montes de Oca Rosales, a decir que gracias al C-5 se logró investigar, localizar y detener a dicho sujeto.
Sin embargo, esto es parte del “circo, maroma y teatro” que acostumbra hacer Oscar Montes de Oca, ya que es un secreto a voces la protección que le brinda a grupos delictivos mediante grandes ingresos económicos para no investigar los casos relacionados con el narcotráfico, además que tiene paralizada a la Policía Ministerial para esta labor y que no acudan a los reportes de personas armadas en cualquier punto de la ciudad.
UN FRACASO EL C-5
En lo que respecta al gobernador Carlos Joaquín González, sigue escupiendo para arriba, pues según el día de la inauguración qué como siempre, se la ha pasado engañando a los quintanarroenses, dijo que con la creación del C-5 se traerá la paz y tranquilidad. ¿Entonces en cinco años de su gobierno nunca ha existido?
El caso es que a pesar de que adornaron con florecitas y bombones la creación del Complejo de Seguridad, este es un fracaso y los “dos mil 600 millones de pesos que costó” supuestamente, fueron tirados a la basura, ya que a menos de un mes de su inauguración, la violencia y la seguridad cada día están peor.
Los ejemplos están claros al menos en la ciudad de Cancún: el viernes seis de agosto fue ejecutado el notario Nahúm Ojeda Hernández, cuando circulaba en su vehículo sobre la avenida Tikal; más tarde, balearon a una persona frente al hotel “City Express” ubicado a un costado de plaza Las Américas; por la noche, cuatro sujetos fueron baleados afuera de un domicilio en la Región 95; y una hora después, dos más y un ejecutado en el fraccionamiento Villas Otoch de la Región 247.
Un par de días antes, un taxista y una mujer llegaron lesionados por disparados de arma de fuego a la clínica regional del Seguro Social; el viernes 30 de julio, dos cabezas humanas fueron halladas en la delegación Bonfil, una de ellas era de un cabecilla de delincuentes en la misma zona. En tanto en el ámbito de robos, por mencionar uno, personal de la clínica “San Vicente” ubicada en la Supermanzana 59 fueron víctimas de un robo con violencia; esto sin mencionar los demás casos ocurridos en el estado entre ligados al narcotráfico y del fuero común.
Lo peor de todo, ni con sus maravillas de tecnología que presume el gobernador no pudieron detener a los responsables de estos casos, aún cuando algunos fueron en pleno día y a unos metros de cámaras de seguridad.
Con esto más claro ni el agua, los responsables de acuerdos con los grupos delictivos son Lucio Hernández Gutiérrez, secretario de Seguridad Pública en Quintana Roo, en lugar de su jefe Capella Ibarra; Oscar Montes de Oca Rosales, fiscal general del Estado; y dentro de estos el presidente del Tribunal Superior de Justicia, José Antonio Ruiz León, quien se encarga de soltar a los delincuentes mediante sus jueces luego del show que hacen sobre detenciones de supuestos cabecillas.
Oscar alias “El Pipo” presunto líder de un grupo delictivo y detenido en la Supermanzana 59 de la ciudad de Cancún, el 20 julio del presente año. Junto con él, un grupo de sujetos; sin embargo tres días después, fue dejado en libertad y se echan la bolita juez y fiscalía.
Comentarios